Tener ansiedad es no sentirte solo, es aprender a ver las cosas, sentir tu cuerpo, estar alerta, valorar cada segundo… Como todo en la vida, la ansiedad tiene sus beneficios y cada uno de ellos te ayuda a ser una mejor persona para ti y para el mundo.
1. Aprendes a reconocer lo que tu cuerpo quiere decirte.
A veces ignoramos las señales que nos da nuestro cuerpo, pero cuando tienes ansiedad esas señales se vuelven más intensas y constantes. Nuestro cuerpo es tan sabio que muchas veces crea padecimientos como la ansiedad para hacernos ver las cosas, para aprender a sentirnos y sanar.
2. Siempre estás alerta.
Como si fueras un guardia, siempre estás alerta de lo que ocurre a tu al rededor. No importa si estás en casa, en la calle o en algún centro comercial. Tu siempre estás alerta y eso es algo muy bueno, te ayuda a saber si estas en peligro o no. Sentir que te siguen o te observan no es un buen sentimiento, pero te ayuda a mantenerte a salvo siempre, sobretodo cuando estás solo.
3. Te vuelves más cercano a tus seres queridos.
Gracias a la ansiedad aprendí a estar más cerca de mis padres, amigos y familiares. De alguna manera cada ataque de ansiedad te muestra una cara diferente de las personas y te ayuda a mantenerte en contacto con ellas.
4. Ves la vida de otra manera.
Si antes veías todo en blanco y negro ahora lo ves a colores, lo mismo pasa si lo veías a colores y ahora lo ves en blanco y negro. La ansiedad te ayuda a salir de tu zona de confort, tanto física como mental. Es por eso que te ayuda a ver la vida de otra manera, te enseña cosas que no habías notado nunca, te lleva por un camino desconocido pero lleno de aprendizaje. Cambia totalmente tu manera de ver la vida.
5. Trabajas tu empatía.
Si antes no la sentías o conocías, ahora que tienes ansiedad la tendrás todo el tiempo. Sentir empatía es ponerte en los zapatos de los demás sin hacerlo, algo raro de explicar pero algo que te deja una satisfacción enorme. Cuando sientes empatía puedes realmente sentir y valorar lo que las otras personas sienten, piensan y hacen. Te das cuenta de que juzgar es una de las peores cosas que puedes hacer, te das cuenta de que en cada persona hay un mundo totalmente ajeno al tuyo pero que de alguna manera es parecido al tuyo.
6. Ves más allá de las cosas.
Antes no me daba cuenta de muchas cosas, pero ahora puedo darme cuenta de que detrás de cada planta hay un universo. Esto viene de la mano con la empatía porque te das cuenta de que vives en un mundo creado por varios mundos, puede que no lo entiendas tan fácilmente pero la ansiedad te enseña a ver más allá de las máscaras que se ponen todos los días las personas. Valoras dónde estás porque puedes ver que hay mucho más detrás de cada lugar, es como ver la historia detrás de las cosas.
7. Nunca te sientes solo.
Si padeces ansiedad nunca te sentirás solo de nuevo, literalmente. Tener ansiedad es como tener un amigo que está ahí contigo cada segundo de todos los días de tu vida. Nunca se va, siempre está presente y tu cuerpo ha creado un cómodo rincón dentro de ti para ella. Padeciendo ansiedad siempre te sentirás acompañado, esto se debe a todos los síntomas que trae consigo. Por ejemplo: sientes que te siguen, escuchas ruidos extraños en todos lados, ves cosas que no habías visto… Suena un poco loco y escalofriante pero en realidad todo esto te da calma cuando aprendes a controlarlo.
8. Prácticas cosas nuevas.
Si antes no hacías ejercicio, lo harás; si antes no podías dormir con tu perro, ahora lo harás… Todo cambia y por lo mismo tu forma de ser y tus hábitos también cambian. Y esto es algo bueno, en realidad la ansiedad te ayuda a salir de tu zona de confort en cuanto a hábitos y actitudes. Gracias a ella aprendí a escribir, a escuchar música por disfrutarla y no solo por escuchar ruido, aprendí a respirar y a trabajar con la mente.
9. Te quitas cargas de encima.
Una de las mejores cosas que la ansiedad ha hecho por mi: dejar atrás las cosas. Cargar con problemas o asuntos es una de las peores sensaciones de la vida, tener tu mente llena de conflictos y preocupaciones y que ni siquiera la mitad de ellas sean tuyas es algo desgastante. Aprender a dejar ir las cosas, a no preocuparte por cosas ajenas y no meterte en conflictos que no te incluyen es realmente satisfactorio.
10. Valoras a las personas.
Muchas veces damos por sentadas a las personas que nos rodean, desde nuestros amigos hasta personas que aparecen en tu vida solo un instante. La ansiedad te ayuda a ver quienes son realmente tus amigos, las personas que se preocupan por ti y te aprecian. Personalmente, la ansiedad me demostró que no todos son amigos y que los que realmente lo son siempre estarán presentes en tu vida.
Me gusto mucho, muchas gracias por ver el lado positivo de esto.
Me gustaLe gusta a 1 persona