México ocupa el segundo lugar en la lista de América Latina con más niños huérfanos en espera de una familia adoptiva.
En México, cerca de 30 mil niños esperan ser adoptados por una familia según un estudio realizado por el INEGI en el 2012, sin embargo, no existe realmente un censo que pueda proporcionar una cifra exacta. Por otro lado, el DIF cuenta con 553 casas hogar en todo el país, sin embargo, en años pasados solamente se resolvieron 429 solicitudes de adopción.
La adopción en México es difícil por varios motivos, entre ellos la preferencia de las personas al adoptar. Las familias, parejas o personas que quieren adoptar buscan niños entre los 4 y 9 años de edad, dejando a un lado a los más pequeños y a los más grandes, por lo que un 70% de niños que van de los 10 a los 18 años quedan en espera de ser adoptados.
Otro de los grandes motivos por los cuales la adopción en México es difícil es porque en cada estado hay trámites, leyes y requisitos distintos. Por ejemplo, de todo el país solamente en la Ciudad de México pueden adoptar parejas del mismo sexo, mientras que en otros estados no. También las cuestiones del matrimonio cambian, en algunos estados se requiere que el matrimonio tenga mínimo 2 años mientras que en otros se necesitan 5 años de antigüedad.
La adopción es un medio para que los niños y niñas que no tienen una familia biológica, han sido abandonados o son huérfanos puedan tener una familia en la que tengan estabilidad tanto emocional, como económica.
La mayor cantidad de adopciones en nuestro país vienen de las Casas Cuna, en donde hay bebés y niños no mayores a los 4 años. Entre el 2012 y el 2017 se realizaron 46 adopciones exitosas. Al parecer, las personas prefieren adoptar a niños pequeños porque la facilidad de adaptación en infantes es más rápida y sencilla, sin embargo, niños con discapacidad, con hermanos y mayores de edad se quedan esperando una familia aun cuando a los 18 años tienen que abandonar la institución donde se encuentran.
Existen varios tipos de adopción en nuestro país:
1. Adopción Simple:
En la adopción simple únicamente se generan los derechos y deberes con el menor, es decir, forma parte de la familia para obtener las necesidades básicas, sin embargo, en esta adopción no se tiene relación de parentesco. Por lo que el niño nada más convive con la familia, pero no adopta los apellidos de la misma.
2. Adopción Internacional:
La adopción internacional consiste en darle una familia extranjera a un niño que no puede tener contacto con sus familiares en su ciudad o país natal, es decir, los pequeños son adoptados por personas y familias de otros países.
3. Adopción Plena:
En este tipo de adopción, la familia adopta a un niño o niña para incorporarlo como un hijo propio, satisfaciendo sus necesidades básicas y haciéndolo parte de la familia legalmente con los apellidos de la misma.
4. Adopción por Extranjeros:
La adopción por extranjeros es aquella que realizan las personas de otros países que son residentes permanentes en el país donde se encuentra, dándole oportunidad a un niño o niña de ser parte de su familia sin llevárselo de su país natal.
«La adopción no es un trámite más de los que se tienen en la sociedad, es la vida de un menor, por eso ningún requisito debe ser visto como engorroso o tardado, ya que no es sencillo entregar a un niño a una familia»
– Luna Lozano –
El DIF realizó un estudio sobre la adopción en México en el 2005 y los resultados son impactantes, ya que se espera que para el año 204 haya una población de 33,242 niños, niñas y adolescentes en espera de una familia.
Muchos de los niños y niñas que se encuentran en el DIF, Casas Cuna y Casas Hogar han llegado ahí por orfandad, abandono, rechazo de sus padres o porque estaban en situación de calle. Muchos tienen familia, pero esta no puede darles lo necesario ni emocional ni económicamente, y muchos de ellos han conseguido ser adoptados por una familia. Sin embargo, quedan muchos en esa larga espera y muchos otros tienen que abandonar la institución en la que se encuentran por cumplir la mayoría de edad.