Todos nosotros hemos estado alguna vez en esta situación en la que nos tomamos las cosas personalmente, como si el mundo se tratara de nosotros y todo girara al rededor nuestro. Pero tenemos que aprender a no tomarnos todo personalmente porque la vida no es de esa manera, existen billones de personas en este mundo y te aseguro que muy pocas de ellas piensan en ti, así que tienes que dejar de tomarte todo personalmente. No importa en realidad si son comentarios o acciones negativas, positivas o agresivas. Tomarnos las cosas personalmente lo único que hace es dañarnos.
1. Pregúntate:
Debes preguntarte a ti mismo qué fue lo que significó el comentario o el comportamiento, no porque las personas no te sonrían de vuelta significa algo malo, puede que esa persona sea tímida o simplemente este pasando por un mal momento. Analiza las situaciones antes de tomarlo personal.
2. Toma en cuenta los comentarios:
Cada comentario puedes tomarlo como una crítica constructiva en lugar de tomarlo como una crítica negativa, Tienes que ver si esa crítica que te han hecho tiene sentido o no, analizar si en realidad tiene verdad en ti y cómo puedes aprender de ello.
3. Date cuenta:
El comportamiento, la educación y los pensamientos en las otras personas son de las tantas cosas que no puedes controlar. Cuando una persona es grosera es simplemente un reflejo de su interior, puede que sea grosero por defensa propia, porque está pasando por un mal momento o simplemente porque su vida no es lo que esperaba.
4. Ve las cosas desde otra perspectiva:
Siempre que te tomas las cosas personalmente tienes que salir de tu burbuja y ver las cosas desde otro punto de vista. Las personas ajenas a tu vida o simplemente otra persona jamás tendrá la misma opinión sobre algo y mucho menos sobre ti. Salirte de tus pensamientos y ver otras perspectivas te ayudará a darte cuenta de que no todo es sobre ti y de que no te tienes que tomar las cosas personales.
5. Entiende:
Debes entender que nunca podrás complacer a todas las personas, siempre habrá alguien que no esté de acuerdo contigo o con tus acciones. Pero eso no signfica que estés mal ni que te tienes que tomar tan a pecho las opiniones de los demás, en realidad es una simple lección de vida.